Ps, Raudel Hernández
Continuamos nuestra serie El Rey de David en 1 Samuel 25, y veremos que aun los supuestamente fuertes se cansan…Aun aquellos que aparentan tenerlo todo resuelto necesitan ayuda, necesitan el socorro de Dios. En este capítulo 25 vemos la fidelidad de Dios en una ayuda inesperada para un líder que no podía más. De esta misma manera, en el cuerpo local nos necesitamos unos a otros… necesitamos la familia de Dios.
Es por eso como congregación hacemos tanto énfasis en unirnos en comunidad, en crecer en grupos pequeños. Y esta próxima semana después del servicio tienes la oportunidad de unirte a un grupo.
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